miércoles, 12 de marzo de 2008

comentario al super blog de Saul

Considero que en nuestro medio aún nos quedan rezagos del modernismo, el cual enfatizó los postulados de la razón y despreció, quizás no voluntariamente, la afectividad.
Precisamente uno de los grandes aciertos del siglo XX fue el de redescubrir aspectos que nunca habíamos considerado o ya habíamos olvidado y revalorar el papel del corazón en la vida humana, que de cierta manera ya habían exaltado las culturas orientales, como es el caso de las relacionadas con el mundo de la Biblia.

Redescubrir la afectividad como motor y fuente de conocimineto y de vida es quizás uno de los grandes retos en una sociedad que se está volviendo cada vez más frívola e indiferente. De ahí que el papel del maestro no puede pasar por alto su calidad de modelo afectivo para sus alumnos.

He escuchado no pocos testimonios de personas que relacionan los conocimientos aprendidos en clase con la sonrisa, las palabras y gestos de apoyo y de amistad con sus maestros. Quizás la idea sobre algún tema académico se olvide, pero no el calor humano que recibimos del maestro...

2 comentarios:

Luz Yepes dijo...

Gracias Saúl por su aporte.
Quiero invitarlo a entrar a esta página http://www3.uji.es/~pinazo/2001Tema%205.htm . para continuar reflexionando acerca de la importancia de la comunicación no verbal en el proceso de aprendizaje. Como reza el dicho: "Vale más una imagen que mil palabras". ¿Cuántas veces hemos frustrado a un estudiante por un gesto o cometario inapropiado?
Bueno, he ahí la misión tan delicada del docente de hoy siempre y más aún con una generación que posee una escala de valores dificil de comprender. ¿Será que el afecto mueve esa montaña?
Saludos
Luz Marina

Luz Yepes dijo...

El comentario anterior es para Franklin quién publicó
Saludos
Luz Marina